Respirar es un proceso vital que ocurre de manera automática desde el nacimiento. Sin embargo, cuando se realiza de forma consciente, se convierte en una herramienta poderosa para regular el estado mental y emocional. Numerosos estudios en psicología y neurociencia han evidenciado los beneficios de la respiración consciente sobre la atención, la reducción del estrés y el bienestar general (Brown & Gerbarg, 2005; Arch & Craske, 2006). Esta práctica se basa en prestar atención plena al acto de respirar a través de diferentes vías sensoriales: la observación, la sensación física, la sensación emocional y el sonido.
Observación 👁️
La observación consiste en seguir mentalmente el recorrido del aire durante la inhalación y la exhalación. Se puede visualizar cómo el aire entra por la nariz, pasa por la garganta, llena los pulmones y luego sale lentamente. Este ejercicio dirige la atención hacia la experiencia corporal y ayuda a reducir la dispersión mental.
Al focalizar la atención en el recorrido de la respiración, la mente se estabiliza y disminuye su tendencia a divagar entre pensamientos automáticos.
Sensación física 🖐🏽
La dimensión física de la respiración constituye un punto de anclaje fundamental al presente. Percibir las sensaciones del cuerpo al respirar —la expansión del abdomen, el movimiento del pecho o la temperatura del aire al entrar y salir— permite desarrollar una conexión más profunda con la propia experiencia corporal.
Desde un enfoque psicofisiológico, la conciencia de las sensaciones físicas activa regiones cerebrales relacionadas con la interocepción, fortaleciendo la conexión entre cuerpo y mente (Farb et al., 2015).
Sensación emocional 😀
La respiración está estrechamente ligada al mundo emocional. Cada emoción modifica el ritmo respiratorio, y cada patrón respiratorio influye a su vez en el estado emocional.
Durante la práctica de la respiración consciente, el objetivo no es cambiar la emoción, sino observarla tal y como se presenta. Esta actitud de aceptación permite regular la respuesta emocional y comprender la relación entre pensamiento, emoción y cuerpo, fundamento esencial de la psicología contemplativa y del mindfulness clínico (Kabat-Zinn, 2013).
Sonido 👃🏽
El sonido de la respiración es otro estímulo sensorial que facilita la atención plena. Escuchar el flujo del aire al entrar y salir, o los sonidos del entorno, favorece la concentración sin necesidad de suprimir los ruidos externos.
Desde una perspectiva meditativa, la escucha atenta del sonido transforma el ruido en objeto de conciencia, integrando el entorno en la práctica. Incluso el silencio entre respiraciones puede convertirse en una experiencia de quietud interior.
Trampa mental
La búsqueda de la felicidad como obstáculo para la felicidad misma.
En ocasiones, la obsesión por alcanzar un estado permanente de felicidad genera el efecto contrario: ansiedad, frustración y autocrítica. Cuanto más se persigue la felicidad, más miedo surge a perderla, activando los mecanismos de alerta del cerebro.
Trampa mental
La búsqueda de la felicidad te atrapa
En muchas ocasiones la obsesión por la felicidad no deja de ser eso, una obsesión. Y como toda obsesión no te deja ser feliz. Cuando más nos obsesionamos con la felicidad, más miedo nos da ser felices, y entonces nuestra mente alerta fija su atención en todo lo negativo para protegerte de las amenazas.
Es así como caemos en la trampa: tan solo debemos de dar pequeños pasos hacia cosas que nos hagan sentir mejor. Esto, curiosamente pasa por quitar vicios, y DESPUÉS añadir hábitos positivos.
Un problema fundamental en este tipo de errores cognitivos es el concepto erróneo de felicidad. No significa tener un estado anímico positivo de forma continua. Se trata de saber interpretar y sobrepasar situaciones difíciles mientras disfrutamos del camino más que del resultado, a la vez que encaminamos nuestra vida hacia decisiones que provoquen miedo ahora pero paz futura.
En resumen, esto provoca que nuestra mente aprenda que podemos tener felicidad tanto si las cosas aparentemente van bien o van mal. La felicidad es no depender del resultado de nuestro día a día, y actuar de forma inteligente: disfrutando de forma inteligente, actuando, y encaminando tu vida hacia quehaceres que te den paz
Consejo
No te tomes este curso como el camino hacia la felicidad, sino como un paso más, un hábito y habilidad agradable que te hace crecer a nivel interno.