Cuando nos encontrarnos en una disyuntiva del tipo no sé que hacer, tenemos dos posibilidades: no hacer nada o hacer algo. Y para tomar la decisión correcta, primero deberíamos de tener en cuenta factores más específicos como los que abordaré a continuación.
El factor tiempo
Primero deberíamos de saber el tiempo que llevamos en esta situación de indecisión y que es lo que estamos haciendo en ella: no haciendo nada o haciendo cosas.
Si llevas mucho tiempo sin hacer nada y sigues sin saber que hacer, haz algo. Si llevas mucho tiempo haciendo algo y sigue sin gustarte, para o haz algo distinto. DE todas formas lo detallo continuación para que puedes decidirte por lógica.
Cuando no hacemos nada
Si llevas tiempo en modo pasivo, porque no sabes qué hacer, lo correcto es hacer algo aunque no sepas el qué. Solo así saldrás del círculo vicioso de la pasividad y la indecisión.
Tanto si haces algo correcto como incorrecto, será producente. Esto es así porque con dicha acción descartas un camino incorrecto, o simplemente aciertas y te mantienes el nuevo camino.
Por otro lado…
Cuando estamos haciendo, sin saber que hacer
También puede darse el caso contrario: estamos haciendo algo pero seguimos con dudas, y no sabemos qué otra cosa hacer.
Aquí hay varias soluciones. Si estás haciendo con dudas algo que no te disgusta y no sabes que otra cosa hacer, termínalo.
Otro camino es el de parar. Si estás haciendo con dudas y te disgusta y no sabes qué otra cosa hacer, para y toma energía. Después de esto último haz algo totalmente distinto.
Cuando estamos haciendo, sabiendo que no es el camino
También hay otra variante: puedes estar haciendo algo con dudas, que te disgusta, y sabes que hay otra cosa distinta que te llena de energía.
En este caso lo mejor es tomar ese nuevo camino, manteniendo el anterior con menor dedicación. Podríamos pensar en dejar de repente todo y cambiar, pero lo cierto es que puedes usar la situación actual a tu favor: si te quedan energías para ese nuevo camino, aún manteniendo el anterior, es porque es realmente correcto.
Cuando te cerciores de esto último, deja por completo el antiguo quehacer y dedícate por completo al nuevo y energizante estilo de vida.
Las últimas pinceladas de la mente subconsciente
A modo píldora, hay veces en las que no nos gusta lo que hacemos por trampas de la mente. Una de ellas es que nos da tanto miedo no conseguir algo, que nuestro cerebro nos ahuyenta del camino haciendo parecer que es algo aburrido. No quiere que fracases y te hace odiar tu trabajo actual.
También, puede que simplemente sea algo que nos guste, pero hayamos abusado de ello. Trabajamos demasiado en la idea y hemos descuidado el ocio, nuestro cuerpo, y las relaciones. Entonces por motivos biológicos-hormonales entramos en modo apático con respecto a la rutina.
Entonces… ¿paro?¿sigo haciendo?¿O…?
Primero reflexiona y observa si has caído en alguna trampa de la mente subconsciente. Si es así, sigue en tu camino actual, y no dejes que gane la partida. Aumenta tu ocio y no tengas miedo al éxito.
Por otro lado, si no has caído en la trampa de la mente haz lo siguiente:
- Cuando no hagas nada durante un periodo de tiempo prolongado y sigas sin saber qué hacer, HAZ lo que sea.
- Si estás haciendo y no sabes qué otra cosa hacer, TERMINA si no te disgusta, o PARA si te está consumiendo. Después de esto último haz algo totalmente distinto.
- Si estás haciendo y sabes que otra cosa hacer, HAZ LAS DOS A AL VEZ HASTA DEMOSTRARTE QUE LO NUEVO REALMENTE TE GUSTA.
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